¿Todavía no has visto a Supechándal? Es el protagonista principal de nuestra campaña de comunicación para la Universidad de Zaragoza concebida para dar a conocer las actividades deportivas dirigidas que ofrece a sus universitarios. Este superhéroe, que en mayor o menor medida todos llevamos dentro, recorre el campus universitario y ha empezado a petarlo en las redes sociales, tanto que ya nos ha llegado alguna propuesta desde algún que otro programa de la televisión autonómica.

¿Cómo dar a conocer a los estudiantes de la Universidad de Zaragoza la amplia oferta de actividades deportivas que pueden disfrutar? Ese fue el reto que nos lanzó Unizar Deportes antes del verano. Y, como siempre en Zúmmum, nos exprimimos al máximo para diseñar el mejor plan de comunicación. Y Superchándal fue cobrando tanta vida que ya nadie puede pararlo.

La clave de nuestra campaña, Ponte en plan Superchándal, que combina PLV, creaciones gráficas, street marketing, audiovisuales y otros contenidos para social marketing, es la encarnación de su protagonista. La ilustración de la cartelería y los folletos repartidos entre el target ha cobrado vida. Así, este superhéroe se mueve alocadamente entre los universitarios, que pueden encontrárselo en las instalaciones deportivas, los accesos, las terrazas, las cafeterías e incluso en los colegios mayores de la Universidad de Zaragoza. Con buen humor y nobles intenciones —fomentar la ejercitación deportiva y la alimentación saludable—, interactúa con su público objetivo a través de charlas, performances y juegos promocionales con reparto de regalos incluido.

Y está cuajando el tío, sí señor. Muchos se hacen fotos con él y, desde luego, nunca pasa desapercibido. Tampoco en Instagram y Facebook, donde sus apariciones están siendo bastante comentadas. Superchándal vuela alto por el campus. Rula por sus instalaciones y se está dejando ver muchísimo. Esta campaña de comunicación para la Universidad de Zaragoza promete resultados, no en vano está dando qué hablar. La expectación está siendo elevada. Solo falta que estos chicos se animen, definitivamente, a hacer deporte en su universidad. ¡Supercháaaaandaaaaaaal!